“¡Pan y rosas!“
JOSÉ G. INFANTE
ecoinfante@gmail.com
Esta fecha permite empoderar a las mujeres y rendir homenaje a las
activistas que trabajan sin descanso defendiendo sus derechos y motivando a las
mujeres a que se desarrollen plenamente
El
origen se remonta al 8 de marzo de 1857, cuando un grupo de obreras textiles tomó la decisión
de salir a las calles de Nueva York a protestar por las míseras condiciones en
las que trabajaban. 120 mujeres fueron masacradas por la policía
Estadounidense.
En
1908 las obreras textiles marcharon con la consigna “¡Pan y
rosas!“, exigiendo reducción de la jornada laboral de 12 horas diarias, recibiendo
solo la mitad del salario de los hombres. Pedían aumento y mejores condiciones
de vida.
En
1910, durante la Segunda Conferencia Internacional de Mujeres Trabajadoras
celebrada en Copenhague (Dinamarca) más de 100 mujeres aprobaron declarar el 8
de marzo como Día Internacional de la Mujer Trabajadora.
Luego
el 25 de marzo pero de 1911, ocurrió un incendio en la fábrica textil de Nueva
York, donde 123 mujeres y 23 hombres murieron durante un incendio
En
1917 las mujeres rusas marcharon el 8 de
marzo, con la consigna “Pan, paz y libertad”, situación que junto a
otras luchas, condujo a la renuncia del Zar y el inicio de la revolución rusa.
Lograron el derecho al voto y mejoras sociales.
El
día de la mujer fue oficializado en 1975 por la Organización de Naciones Unidas
(ONU).
El
lema del 2018 es “Ahora es el momento: Las activistas rurales y urbanas
transforman la vida de las mujeres”
Saludos
a las mujeres venezolanas, en especial a las periodistas y reporteras y a las
mujeres ambientalistas y ecologistas del país.
No
es una fecha romántica, es una conmemoración con sentido político y social.
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