jueves, 14 de febrero de 2019

Los Guardaparques y su rol social

Su principal aspiración es un presupuesto justo para los parques y el reconocimiento y la inclusión de los GP voluntarios
José G. De Sousa Infante

 PRENSA FUNDACION GUARDEAM ecoinfante@gmail.com      @guardeam
                             guardeamvenezuela@gmail.com

   El 13 de febrero se  celebra el día del Guardaparques Venezolano, recordando que en esta fecha pero en 1937, fue decretado el primer parque nacional de la historia de Venezuela, denominado en su época Rancho Grande y que hoy en día se conoce como Parque Nacional “Henri Pittier” en memoria del botánico y etnólogo Suizo, quien impulsó los esfuerzos para que el país tuviera su primer parque nacional.
 Los parques son los territorios más importantes del planeta y producen tantos beneficios ecológicos, sociales y económicos, que no se le pueden dejar solo a los entes de gobierno; sino que es una labor que involucra a toda la sociedad.
La deficiente administración de las áreas naturales en nuestra nación, impulsó el nacimiento de los Guardaparques Voluntarios (GPV), en plena democracia participativa y protagónica, pero que el estado aún no los reconoce formalmente. Hoy día la situación de algunos parques y otras áreas protegidas es lamentable.
Recordaron este día en Venezuela recibiendo el salario más bajo del continente americano y sin los equipos y recursos necesarios para preservar los ecosistemas estratégicos de una nación megadiversa.


Guardafaunas y Guardaparques Voluntarios de Fundación GUARDEAM, en el refugio de Fauna Los Olivitos

¿Quiénes son los Guardaparques?
Son funcionarios de gobierno o agentes voluntarios de la conservación, formados integralmente para proteger los parques y otras áreas naturales. Realizan esta labor apoyados en su puesto o mediantes patrullajes permanentes. Entre sus actividades están la educación, interpretación, investigación y recreación para el público visitante, así como prevención, vigilancia y control.
Defensores de los bosques con muchos nombres
Son llamados también Guardabosques, Guardafaunas,  Park Rangers (EEUU), Agentes Rurales, Agentes Medioambientales, Agentes Forestales, Guardas de Coto, Guardas de Caza, Verderers (Reino Unido), Guardas Florestais (Portuguès), Gardes Forestiers (Francés) Ranger del Parco (Italiano) etc
 
Tipos de Guardaparques: Según el Manual de Guardaparques de Fundación GUARDEAM, existen tres tipos de Guardaparques:
Guardaparques Nacionales: Son funcionarios públicos contratados por la autoridad que administra las áreas en este caso INPARQUES para proteger los Parques Nacionales y Monumentos Naturales. Son llamados Guardaparques Nacionales. En este grupo se incluyen los Guardaparques creados en el Parque Recreacional Negra Hipólita en Carabobo que también son empleados de la Gobernación de Carabobo. Los Parques de Recreación son custodiados por Vigilantes.
  Uniformes de los GP nacionales incluyendo los del Parque Negra Hipólita que son contratados por la Gobernación de Carabobo y el logo de la Asociación nacional de GP nacionales.
Guardaparques Privados: Son Guardaparques que trabajan en las reservas o Parques privados es decir administrados por otros entes independientes de los gobiernos. En Venezuela existen áreas privadas de conservación en los Hatos de los Llanos (Masaragual, Hato El Frio, Hacienda Guaquira en Yaracuy) pero no cuentan con Guardaparques.
Guardaparques Voluntarios: Son agentes voluntarios de la conservación. Personal capacitado y altamente motivado formado integralmente para colaborar en la protección de los parques pero que realizan su labor Ad honorem (sin honorarios o sin pago). Cumplen sus funciones disciplinadamente en Parques Nacionales, Monumentos Naturales, Parques Recreacionales, Parques Zoológicos, Parques Urbanos y realizan actividades ambientalistas dentro y fuera de las áreas protegidas. Los podemos clasificar en Voluntarios, Comunitarios. En algunos países existen Guardaparques Indígenas.



Cuerpo Civil de Guardaparques: En la Gaceta Oficial N° 40.564, de fecha miércoles 17 de diciembre de 2014, se publicó la resolución Nº 342, del 04 de diciembre del 2.014 del Ministerio del Ecosocialismo, Hábitat y Vivienda mediante el cual se crea el Cuerpo Civil de Guardaparques, adscrito al Instituto Nacional de Parques (INPARQUES), el cual será responsable de la capacitación y formación de sus miembros.
INPARQUES también cuenta con el Reglamento del Cuerpo Civil de Guardaparques Providencia Administrativa Nº 322/16 de fecha 21-12-2016.
Cuerpo Civil de Guardaparques Imagen tomada de www.inparques.gob.ve
Funciones de los Guardaparques (tomadas del Manual de Guardaparques de Fundación GUARDEAM)
1. Prevención, Vigilancia y Control (PVC)
2. Monitoreo  (MO)
3. Atención al Público  (AP)
4. Educación Ambiental e Interpretación de la Naturaleza (EAIN)
5. Búsqueda, Rescate y Salvamento (Incluye Salvavidas)  (BRS)
6. Apoyo a la Investigación (AI)
7. Funciones Administrativas (AD) Como: Taquillero, Administrador de un Área o Jefe de Sector o Superintendente                                  
8. Combate de Incendios o Bombero Forestal (debe tener el curso de Bomberos) (CI) (BF)
9. Policía Administrativa para lo cual debe tener un curso especial (PA)
10. Chofer de autos, lachas (CH)
11. Operación y Mantenimiento, de los equipos y las instalaciones tales como moto sierras, vehículos, etc. (OM)
12. Planificación, Administración y Manejo del Área (PAM): Participa en las labores de gestión, administración diseño de los planes de manejo del área.
13. Especialista (Es): Actividades Como Submarinista, Salvavidas, Guía De Alta Montaña
 
El rol social del Guardaparques en el 2019
Los Guardaparques, sean funcionarios o voluntarios, tienen  un rol muy importante que cumplir en la sociedad. El cumplimiento de esta labor se hace apremiante en medio de la situación país y de la crisis inducida y/o magnificada que vive Venezuela:
1-Garantes de la ética conservacionistas a lo largo del tiempo. La creación de cada parque o monumento natural, ha tenido una historia particular, en algunos casos luchas complejas durante décadas, extensos debates, intereses económicos y la dificultad adicional de tener que sortear toda clase de alcabalas políticas y enfrentar a los desarrollistas  que como “garrapatas” se pegan a los gobiernos de turno.
  En Venezuela se consolidó una ética de la conservación. Pareciera que reencarnaron los ideales y el espíritu de defensa del territorio de los pueblos indígenas y los héroes de la independencia, pero mezclados con el pensamiento ecologista internacional y el conocimiento de las ciencias naturales.
Hoy más que nunca, es necesario revitalizar esta ética que nos legaron Henry Pittier, Arturo Eichler, José Rafael García, Expedito Cortez, Arnoldo Gabaldón, Francisco Tamayo, Francisco Quero, José Luis Méndez Arocha,  ya fallecidos; pero, sus ideas deben estar más vivas que nunca.
El rol del Guarda…; es rescatar y estudiar este pensamiento y defenderlo dentro de la institución, enfrentar a quienes promueven la destrucción o desconocimiento de las áreas protegidas y combatir el desarrollismo a ultranza disfrazado todavía de política de estado o de “orden de Caracas”, en clara contradicción con la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV) y su 25% de contenido ambientalista y el Plan de la Patria y su V Objetivo Histórico, que son a su vez la materialización de estas ideas que pasaron de generación en generación.
Hoy día en que el movimiento ambientalista Venezolano esta desarticulado y desmoralizado por la crisis económica; en que los funcionarios están apáticos o se encuentra muy limitados para cumplir sus funciones, es urgente aferrarse a este pensamiento llamado “Conservacionista”, acusado de ser romántico, “comeflor” y obstruccionista del desarrollo. Es necesario tomar lo mejor de esas ideas y reimpulsarlas hoy, para contrarrestar la “blandenguería”, apatía y complacencia de los ambientalistas contemporáneos y de la mayoría de funcionarios de gobierno.
2- La conservación es liderar, es decir influir en los grupos sociales y motivarlos a apoyar unas propuestas beneficiosas para toda la sociedad. Liderar dentro de sus áreas asignadas, para mejorar la gestión; integrar a las poblaciones vecinas, las cuales deben pasar de ser comunidades aledañas a comunidades que conviven con los parques, un cambio conceptual y de participación e inclusión en las labores de protección.
Guiar e impulsar la transformación institucional (INPARQUES y MINEC (Ministerio de Ecosocialismo y Aguas)). Esto es emprender una lucha reivindicativa, pues mientras más beneficios sociales y estabilidad tengan estos funcionarios más garantía de conservación. Es una relación directa y proporcional: un funcionario bien pagado, una institución bien dotada, repercutirá en una mejor labor de patrullaje, vigilancia, educación, especies bien preservadas, zonas del parque mejor cuidadas, mejor atención al público, etc.
Guardaparques Funcionarios, tu lucha es nuestra lucha, tus logros se traducirán en beneficios ambientales para la población (agua potable, oxigeno, descontaminación atmosférica, regulación climática, generación de energía, aseguramiento de genes, entre otros).
3- Los Guardaparques, tiene la sagrada responsabilidad de preservar los territorios más importantes del planeta: los últimos bosques vírgenes, los hábitats de especies, únicas, raras o en peligro de extinción o los sitios de anidación, reproducción, es decir constituyen el albergue natural del patrimonio genético del planeta. En términos Darwinianos (Teoría de la evolución) se puede afirmar, que un Guarda… debe proteger los logros de millones de años de evolución bio-ecológica y garantizar que este proceso siga en curso. No tiene el estado, ni el Cuerpo Civil de Guardaparques, ni los Grupos y Brigadas Voluntarias, excusas para  justificar que se permitió la extinción de tal o cual especie que apareció en el planeta hace miles de años. No se puede permitir la extinción de especies por causa antropicas.
4-Tienen la tarea de proteger las nacientes o manantiales de agua y las cuencas hidrográficas; es decir aquellos lugares donde se genera o almacena el líquido vital. Igualmente deben promover entre la ciudadanía, la convicción de que  el acceso al agua potable es un derecho humano; por lo que entonces los Guardabosques también son defensores y garantes de los derechos humanos. Si esta protección no se realiza satisfactoriamente, seremos testigos de conflictos sociales en los pueblos y ciudades que dependen de estas fuentes; como los que están actualmente en proceso en Venezuela: cientos de protestas por agua potable que es líquido vital y derecho humano.
5- Preservar también los lugares de patrimonio arqueológico, cultural y ritual; tales como petroglifos, cementerios indígenas, pinturas rupestres o arte antiguo, construcciones. En el caso de Latinoamérica los caminos reales, las fortificaciones y fincas, acueductos, terrazas, construidas por los indígenas y africanos esclavizados, bajo el látigo de los colonizadores españoles. Todos estos lugares albergan la memoria de la humanidad.
También confluyen en estos territorios espacios de interés histórico, como aquellos donde se realizaron batallas en la independencia o guerras civiles o donde se dictaron proclamas o en los que sucedieron hechos que marcaron la historia de la nación. Por ejemplo; en algunos Parques de Venezuela, están los descendientes del árbol Samán de Güere** (Samanea saman), un gran árbol que bajo su sombra se reunieron y descansaron varios líderes y ejércitos de la independencia de Venezuela y las tropas de los realistas.
6-El Guardaparques es el intermediario entre el estado y los ciudadanos en materia de conservación de áreas protegidas. Es la cara amable que recibe a turistas y visitantes, es el orientador y educador; además de proporcionar primeros auxilios, combatir incendios y realizar la búsqueda y el rescate de turistas y excursionistas extraviados en los parques.
7-Es el brazo de la ley, en estos remotos territorios, encargado de realizar los procedimientos administrativos sancionatorios. Hoy día deben velar para darle impulso procesal a las causas, asumiendo una función más allá de sus competencias iníciales.
8- Son claves en el apoyo a investigadores; por lo que su trabajo y conocimiento del hábitat, tiene aplicaciones en la ecología, zoología, biología, veterinaria, farmacología, genética, agroindustria y muchas otras áreas más, generando desarrollo científico, tecnológico y económico.
9- Son los impulsores de la nueva cultura de conservación de la naturaleza, hoy llamada cultura ecosocialista. Lo que implica asumir un rol político, que demandará más formación e interacción con los diferentes públicos.  Consideramos que el Guardaparque debe ser hoy día, un militante del ecosocialismo, impulsando una nueva ética, una nueva forma de hacer las cosas, con miras a consolidar un nuevo modelo político, que sea una verdadera alternativa frente al destructivismo capitalista o el desarrollismo socialista tradicional.
10-Contribuyen a elevar el nivel de vida de la población y con ello la primicia de dar al pueblo la mayor suma de felicidad posible. Esto es real y se aprecia cuando visitantes, excursionistas y turistas realizan su sueño de conocer o pasear en un parque; tal como la mágica experiencia de visitar Canaima, el Roraima, Morrocoy, Cuevas del Guácharo, el Blanquito del Parque Nacional Yacambú, el Cerro Saroche y otros espacios.
11-Los Guardaparques además deben sumarse a la lucha contra la corrupción, el burocratismo y la indiferencia. Estos héroes naturales son bien valorados por la sociedad, que reconoce la ética, nobleza e importancia de su trabajo; por tanto deben transmitir mensajes positivos a la población para modelar la conducta social.
Las exigencias y propuestas de los Ambientalistas y Guardaparques Voluntarios
Los voluntarios complementan las labores de los funcionarios y cumplen roles similares. Tiene como ventaja su cercanía a INPARQUES, pero a la vez su independencia de la institución. Esto les permite, conocer la problemática de la gestión ambiental, a su vez denunciarla y proponer alternativas de solución. Deben liderar campañas de conservación, apoyar la labor de funcionarios cuando estos se enfrentan a “poderosos y protegidos”. En este sentido urge consolidar a nivel de cada estado y municipio un poderoso movimiento ecologista que motive, impulse y apoye la labor de las instituciones ambientales, vigile, sea contralor social de los recursos del estado y de la correcta administración de las áreas protegidas.
Debe además luchar para lograr la incorporación del pueblo en la gestión de los parques y en  la aplicación de las leyes ambientales,
Exigen un presupuesto justo para los parques, mayor atención para estos territorios donde se genera el agua, el oxigeno y donde nace el rio Caroní que se utiliza para la generación de energía eléctrica. Exigen revisar las concesiones mineras en el “Valle del Turbio”, la amenaza al “Parque Municipal Cerro La Vieja”, las concesiones del Arco Minero, y el desarrollismo minero y extractivismo que se quiere instaurar en todo el país sin consultar a la población, sin un plan de mitigación ecológico y violando la normativa ambiental.
Los Guardaparques Voluntarios solicitan una política nacional de inclusión y reconocimiento que incluya:
1.  Decretar una norma o ley; que establezca el reconocimiento de los grupos voluntarios, financiamiento, capacitación, prioridad en la contratación cuando hayan vacantes, dotación de materiales y equipos.
2.  Atención a las denuncias que regularmente estos grupos realizan y su incorporación en un sistema de protección y emergencias ambientales.
3.  Financiamiento a los programas de conservación propuestos por estas organizaciones y exoneración de pagos en campamentos, excursiones y pernoctas en los parques así como en los permisos de investigación y producción de audiovisuales.
Escuelas de Guardaparques
Una de las aspiraciones del movimiento ambiental, es que sus escuelas de formación sean reconocidas por el estado y que se promueva un proyecto que integre a las existentes. El certificado debe ser Guardaparques Voluntario con el contenido estándar cursado por los Guardaparques en diferentes países. La Universidad del Ambiente “Fruto Vivas” puede asumir esta tarea.
Los Guardaparques nacionales y Voluntarios, deben liderar la gestión ambiental y rescatar el pensamiento conservacionista de los precursores del sistema nacional de parques.
**(El Samán de Güere, por sí mismo y sus descendientes constituyen un Monumento Natural según la propia definición que incluye no solo lugares, sino especies vivas de especial interés. Algunos especialistas coinciden que como Monumento solo debería declararse territorios y no especies; pero eso debe ser tema de otro artículo).

martes, 22 de enero de 2019

Razas, variedades y subespecies: ¿son lo mismo?



Los términos de “raza”, “variedad” y “subespecie”, aplicados al Reino Animal, son palabras que generan frecuentemente confusión. La razón es que designan conceptos muy similares entre sí lo que causa que se usen muchas veces como sinónimos (incluso no pocas veces en el ámbito académico especializado). En esta crónica voy a tratar de explicarte el significado de cada uno de ellos, y sobre todo, te enseñaré a utilizarlos con propiedad. 
Las razas caninas son el ejemplo más clásico de raza doméstica
Raza 
Voy a adelantarte desde ahora mismo, que estos tres términos designan algún tipo de población animal, siempre dentro de una especie, que se distingue del resto de sus congéneres en algún tipo de rasgo visible, en principio. No quiero entrar aquí en sesudas definiciones que tengas que aprenderte de memoria, ni tampoco en profundidades biológicas. Lo que me interesa sobre todo es que entiendas los conceptos, e ilustrártelos con ejemplos. Luego tú vístelos con las palabras que mejor te encajen. 
Empezaremos por la raza. Intuitivamente, una raza es un grupo en que se subdivide una especie tomando en consideración rasgos fenotípicos, esto es, externos. Digamos que un ser vivo tiene dos partes fundamentales en cuanto a su aspecto: el genotipo es el conjunto de instrucciones y códigos genéticos que almacena en su ADN. El segundo es el fenotipo, es decir, el aspecto externo ue podemos ver con nuestros ojos, y que es la expresión física del genotipo, que no podemos ver. Estos rasgos se transmiten de generación en generación. 
Debes tener clara una cosa importante: la “raza” no es categoría taxonómica en Zoología (o sea, una categoría clasificatoria). Es un término sin ningún valor científico, pero sí con un valor descriptivo. 
Raza vacuna sueca roja y blanca
Actualmente, el uso del término “raza” está reservado exclusivamente para los animales domésticos. Es decir, se habla de “razas de vacas”, “razas de ovejas” o “razas de perros”, pero nunca se usan frases como “razas de leones”, “razas de mejillones” o “razas de saltamontes”. Por tanto, las características físicas que conforman una raza determinada son producto de la selección artificial por parte del ser humano. 
Así, si tomamos como ejemplo el perro, vemos que cada raza canina viene definida por una serie de características: tamaño, figura, tipo y color del pelo, tamaño de las orejas, patas u hocico, etc. Así, el perro de raza pastor alemán es exteriormente muy distinto al perro de raza San Bernardo, o el minúsculo perro de raza chihuahua es completamente diverso del gigantesco perro de raza Gran Danés. Es decir, una raza viene normalmente definida por un conjunto de varios rasgos morfológicos diferentes, pero dentro de una especie con una unidad genética
Es decir, siguiendo con el ejemplo de los perros, que es muy fácil de entender, pastores alemanes, San Bernardos, chihuahuas o Gran Daneses, por muy distintos que externamente puedan parecer, son todos ellos perros con un mismo perfil genético o filogenia. Por eso, las razas domésticas pueden cruzarse entre sí, y obtenerse razas híbridas fértiles que luego el ser humano ha ido modificando a su conveniencia. 
Variedad 
El término “variedad” es muy vago y muy frecuentemente se usa como sinónimo de “raza”. Pero no lo es. Al igual que sucede con “raza”, “variedad” no constituye ninguna categoría taxonómica en Zoología. Pero, ¡atención!, en Botánica sí lo es: es una categoría reconocida por debajo de “subespecie” y por encima de “forma”. Pero nosotros vamos a referirnos aquí a las variedades zoológicas. 
De todos modos, hasta 1961 “variedad” sí se usaba en Zoología en el sentido de “subespecie”. A partir de ese año la Comisión Internacional de Nomenclatura Zoológica (ICZN) dejó claro que sólo la categoría “subespecie” sería reconocida por debajo de “especie”. 
Bueno, basta de cháchara. ¿Qué es, entonces, una variedad?, ¿cómo puedes usarla con propiedad hablando de animales silvestres? 
Una variedad es una población de individuos de una especie, que se diferencia fundamentalmente del resto de congéneres en un único rasgo morfológico. A diferencia de la raza, que se basa en un conjunto de varios rasgos morfológicos, y se aplica sólo a animales domésticos, la variedad se aplica a fauna salvaje y se basa en un solo rasgo. A semejanza de la raza, una variedad siempre va a mantener el mismo perfil genético que su población de referencia: si es una especie, tendrá la misma línea genética que la especie. Si es una subespecie, tendrá la misma línea genética que la subespecie. 
Ejemplos de animales melánicos.
Para que lo entiendas mejor, nada como unos ejemplos. ¿Has oído hablar del albinismo o el melanismo?. ¿recuerdas cuando te hablé del melanismo industrial en la crónica de Darwin y el Origen de las Especies?. Un animal es melánico cuando, debido a un exceso de melanina (que da color a la piel), presenta un color completamente negro. Tal vez el animal melánico más famoso del mundo es la pantera negra, que no es más que una variedad melánica (¿ves cómo se usa la palabra?) del leopardo (Panthera pardus), más concretamente en la zona de Indochina. 
Las panteras son leopardos idénticos en todo a sus congéneres de la región excepto en la pigmentación, y sólo en la pigmentación. Por eso hablamos de “variedad” de leopardo. 
Otro ejemplo de “variedades” zoológicas nos lo da la Regla de Bergmann. Según esta regla, los individuos o subespecies (en su caso) de una especie tienden a aumentar de tamaño cuando el clima es más frío. Esto es así porque un tamaño mayor minimiza la relación entre el volumen y la superficie del animal, y esto se traduce en una menor pérdida de calor, algo fundamental en climas fríos. Por eso, en Eurasia, cuanto más al Este y más al Norte, más grandes son los animales porque el clima se hace más riguroso. 
Un ejemplo de ello son los alces que viven en Suecia. Como puedes ver en el gráfico que adjunto, se ha estudiado el tamaño de los mismos según la latitud. Puedes ver claramente cómo el tamaño aumenta según ascendemos hacia el Norte. En Escandinavia, el alce pertenece a la subespecie nominal (más adelante te voy a explicar qué es esto). Lo más importante es que tanto los alces más grandes como los más pequeños, dentro de Suecia, presentan el mismo perfil genético correspondiente a esa subespecie nominal. La única diferencia entre ellos es, pues, el tamaño. Podemos decir que los alces norteños en Suecia son una variedad de alce escandinavo, más grande que el resto. 
Variación del peso de los alces con la latitud en Suecia
Subespecie: la caja de Pandora dentro de la caja de los Truenos. 
Si el concepto de especie ya es, de por sí, discutido y discutible, el de subespecie es aún más polémico. Una subespecie es un grupo de individuos de una especie que, además de los caracteres propios de la misma, tienen en común otros caracteres morfológicos que los distinguen de las demás subespecies o de la población nominal. Pero, vamos a ver, ¿no es esto mismo una raza?. No. La diferencia fundamental entre raza y subespecie es que aquella mantiene la unidad genética fundamental de la especie, mientras que ésta constituye líneas genéticas distintas
Subespecies de lavandera boyera Motacilla flava
Es decir, una subespecie podría considerarse como un paso previo para la formación de una nueva especie, si se dieran las condiciones adecuadas. Porque, en estado salvaje, las distintas subespecies no se solapan entre sí, ni se cruzan porque mantienen un aislamiento geográfico y genético entre ellas. Siempre hablando en términos generales. La subespecie sí es una categoría taxonómica, y se designa por un trinomen: Genero + especie + subespecie. Así, nuestros alces suecos serían Alces alces alces. Pero la pantera negra sigue siendo Panthera pardus, porque una variedad no es una categoría taxonómica. 
En resumen, las subespecies son poblaciones genéticamente diferenciadas dentro de una especie dada. 
El guacamayo jacinto es un ejemplo de especie monotípica
¿Todas las especies tienen subespecies?. No. Hay especies llamadas “monotípicas”, que no presentan subespecies, como puede ser el guacamayo jacinto Anodorhynchus hyacinthinus y hay especies “politípicas”, que sí tienen subespecies reconocidas, como el tigre Panthera tigris. Dentro de las especies politípicas, se conoce como población nominotípica a la primera población de esa especie donde fue descrita la especie por primera vez. Por tanto, las subespecies que se puedan describir de esa especie se comparan siempre con esa población, que recibe entonces el nombre de subespecie nominal, como el caso de nuestros alces escandinavos. 
¿Por qué digo que el concepto de subespecie es polémico?. Porque, al menos hasta hace muy poco, la descripción de una subespecie dependía de la apreciación subjetiva de la persona que hacía la descripción. Por ejemplo, no sé si recuerdas cuando te hablé de las subespecies del lobo. Nuestro naturalista Ángel Cabrera se fijó en los lobos de la Península Ibérica y le pareció que eran más pequeños que los demás lobos. Además, en sus antebrazos hay unas marcas oscuras que no tienen los otros lobos. Por eso, él describió la subespecie “lobo ibérico” y la denominó Canis lupus signatus. Es más, fijándose en lobos de la parte sureste de la Península ibérica, creyó apreciar otras características distintivas y describió otra subespecie de lobo: Canis lupus deitanus
Sin embargo, cuando la comunidad internacional de especialistas examinó el trabajo de Cabrera, a ellos no les pareció que esas diferencias morfológicas fueran tan acusadas e importantes, y finalmente no reconocieron las dos subespecies que Cabrera describió. 
Esto pasa constantemente: un especialista aprecia que un individuo o una población es más alta, más baja, más clara, más oscura, con los dientes más largos o más cortos, con un lomo más cóncavo o más convexo…pero otro especialista observa al mismo animal y no aprecia nada de eso. Por eso las subespecies están constantemente en revisión. Un buen ejemplo de ello es el tigre, que antes te ponía como ejemplo de especie politípica. 
Subespecies de tigre clásicamente consideradas
Tradicionalmente, los especialistas reconocían nueve subespecies de tigre: 
-Tigre de Bengala Panthera tigris tigris (subespecie nominal: India) 
-Tigre siberiano o del Amur P.t.altaica (Ussuria, Manchuria) 
-Tigre del Caspio P.t.virgata (del Cáucaso al Asia Central, extinguido) 
-Tigre de China P.t.amoyensis (China estricta) 
-Tigre de Indochina P.t.corbetti 
-Tigre de Malasia P.t.jacksoni 
-Tigre de Java P.t.sondaica 
-Tigre de Bali P.t.balica 
-Tigre de Sumatra P.t.sumatrae 
Todas estas subespecies habían sido descritas con base en diferencias de tamaño, color y diseño del pelaje. Sin embargo, la taxonomía del tigre fue revisada en 2017 con base a un nuevo criterio: el perfil genético. Esta técnica ha terminado con la ambigüedad de las apreciaciones “a ojímetro”, y han permitido eliminar subespecies donde no existían en realidad, y añadirlas donde sí existían. Según esta revisión, sólo existen dos subespecies de tigre: 
-Tigre continental P.tigris tigris 
-Tigre insular (Java/Bali/Sumatra): P.t.sondaica 

Cladograma de los tigres. Obsérvese los dos grandes "clados" correspondientes a las dos subespecies actuales
Dentro de los tigres continentales, existe una variedad de mayor tamaño que los demás, de acuerdo con la Regla de Bergmann: el tigre de Siberia, que ya no tiene una categoría taxonómica ni trinomen. ¿Empiezas a verlo claro? 
Distribución histórica y actual de las subespecies tradicionales de tigre
Una de las consecuencias positivas que ha tenido el análisis filogenético, es el de descubrir subespecies en especies anteriormente consideradas “monotípicas”: se llaman “complejos de especies” o “cripto-especies”, puesto que externamente no presentan ninguna diferencia, pero internamente tienen diferenciación genética a nivel de subespecie. Un ejemplo de ello son las seis especies de la rana Hypsiboas calcaras-fasciatus.
Otro ejemplo de especie con subespecies, esta vez sin discusión, es el chimpancé (Pan troglodytes). Se reconocen cuatro subespecies, que viven aisladas geográficamente entre sí: 
-Chimpancé occidental Pan troglodytes verus (Guinea Conakry) 
-Chimpancé de Nigeria/Camerún P.t.ellioti 
-Chimpancé central P.t.troglodytes (subespecie nominal – Congo Central) 
-Chimpancé oriental P.t.schweinfurthii (Congo oriental) 
Aquí puedes ver un mapa que muestra cómo se distribuyen las subespecies de chimpancés: juntas, pero no revueltas. En el cladograma que verás a continuación se comprueba cómo cada subespecie constituye una línea genética diferente.
Área de distribución de las subespecies de chimpancé
Cladograma de las subespecies de chimpancé
¿Qué sucede con el ser humano? 
Zoológicamente los humanos somos primates, de modo que la pregunta sale sola: ¿se aplica al ser humano alguna de las categorías de raza, variedad o subespecie? 
Los estudios filogenéticos son claros: ni al humano moderno ni a las especies anteriores de Homo les corresponden subespecies. Los humanos somos, en ese sentido, una especie monotípica. Algunos especialistas han intentado establecer que el Neandertal o el denisovano fueron subespecies del hombre moderno, pero no ha prosperado esta línea de pensamiento. 
Pasemos a la variedad. Aquí la precisión empieza a perderse pero existen estudios que aseguran que la Regla de Bergmann también afectaría a la especie humana, siendo algunos grupos humanos norteños, como los aleutas, los inuit y los sami, más “pesados” que el resto de humanos. Siguiendo el criterio que te he marcado antes, serían “variedades” humanas más grandes pero personalmente me parece que es una apreciación un tanto endeble. 
Las razas humanas son una realidad polémica
La verdadera polémica viene con la aplicación de la palabra “raza” a los humanos. Vamos a tratar de razonarlo. 
Si te das un paseo por las grandes capitales de Europa Occidental o de Norteamérica, como Londres, París, Madrid, Nueva York o Toronto, al observar a la gente de tu alrededor te vas a dar cuenta de la gran variedad de aspectos que tienen: algunos tienen la piel negra, los labios gruesos, la nariz chata y el pelo crespo. Otros tienen la piel amarillenta, los ojos rasgados y el pelo lacio. Otros tienen la piel pálida, el pelo y los ojos claros…sí, son rasgos físicos externos que distinguen ciertas poblaciones de otras, y que no contradicen la unidad genética de la especie humana. 
En efecto, ya desde el mismo momento de la clasificación linneana, en el siglo XVIII, se reconoció el concepto de “razas humanas”. Eso sí, aunque a ojo pueda parecer sencillo, nunca se ha llegado a categorizar cuántas razas humanas existen, y qué rasgos definen a cada una de ellas. 
Por eso, los especialistas se lanzaron a la tarea de estudiar las razas humanas para poder conocer sus características y su origen. Y aquí se empezó a liar, porque a mediados del siglo XX comenzaron a aparecer abusos graves dentro de este campo de estudio. En efecto, en 1859 aparece la obra clave de Darwin “El Origen de las especies” justo en el momento en el que la Segunda Revolución Industrial empezaba en Europa y Norteamérica. Como consecuencia de esta Revolución, las naciones anglosajonas y germánicas alcanzaron cotas de desarrollo político, industrial, económico y social superiores a otras naciones del mundo. 
Aparece, en el seno de estas sociedades, el llamado darwinismo social, que tiene dos vertientes: la primera: los pueblos anglosajones y germánicos serían “más aptos” para la supervivencia que otros pueblos más “atrasados” (según ellos), y tendrían “derecho” a “tutelarlos” y a “civilizarlos”. Esto sería la justificación del Colonialismo que vendría luego. La segunda: dentro de las propias sociedades “desarrolladas”, las “clases” adineradas serían “más aptas” para la supervivencia que las más “pobres”, y por tanto tendrían idéntico “derecho” a “controlar” y “tutelar” a las clases “inferiores”. 
Por tanto, surge el racismo: el trato diferente a personas según su raza o, más ampliamente, según condiciones sociales. Así, en los EEUU (hasta 1965) y en Sudáfrica (hasta 1994) se instauran sistemas de apartheid, o separación física de las razas blanca y “de color”, con detrimento de derechos y oportunidades a éstos. También, en algunos países anglosajones y germánicos existieron leyes de esterilización para que las categorías sociales “inferiores” no pudieran reproducirse. 
Siniestro, ¿no? 
"La carga del hombre blanco". La raza blanca debía "tutelar y civilizar" a las razas "inferiores"
Pues todavía vendría lo peor. Como culminación y última consecuencia de toda esta cultura racista que venía incubándose desde mediados del siglo XIX, el régimen nacional-socialista de Adolf Hitler en Alemania llega a exterminar físicamente a todos aquellos individuos considerados “inferiores” y, como tales, enemigos del “pueblo” alemán. 
El estudio de las razas humanas cayó, por tanto, en el descrédito absoluto y, al terminar la Segunda Guerra Mundial, a partir de los años 1950 desaparece de los programas científicos. Es más, andando el tiempo surgen corrientes de opinión según las cuales las razas humanas “no existen”, y en realidad son sólo “constructos sociales”. Según este movimiento, hay que eliminar el concepto de “raza humana” y sustituirlo por el de “etnia”. 
No estoy de acuerdo con esto. El concepto de “raza” es biológico, y el de “etnia” es socio-cultural, por lo que ahí sí que nos metemos en un avispero del cual no conseguiríamos salir nunca. Aun a riesgo de ser impopular, debo decirte que las razas humanas sí existen. A mí no me parece que una nariz chata, una piel rojiza o unos ojos rasgados sean “construcciones sociales”. 
Los hechos científicos en general, y biológicos en particular, no pueden ser negados. Es bastante curioso, además, que desde personas afines a estos movimientos se suele hablar de personas “racializadas”, refiriéndose siempre a cualquier persona de raza no blanca. Luego sigue manejándose el concepto de raza, si bien bajo ciertos eufemismos. Lo que ha pasado es que la política, el nacionalismo, y otras ideologías han manipulado esta rama del conocimiento humano. Y cuando las ideologías interfieren en la búsqueda libre del conocimiento, éste se resiente, se falsea y entonces la finalidad de la Ciencia se pervierte. 
Apartemos las ideologías de la Ciencia, y volvamos a mirar el Reino Animal con el asombro de un niño, el mismo que tú me muestras cuando te cuento estas crónicas.